En el día de hoy, los presidentes de la Federación de Municipios de Cantabria (Pablo Diestro Eguren) y el Banco de Alimentos Infantiles (Jose Antonio Abad Cebao), han firmado un convenio de colaboración para luchar contra la pobreza infantil.

 

Pablo Diestro anima a todos los ayuntamientos de Cantabria a crear ayudas de emergencia social específicas para la población infantil, por ser los infantes, los más débiles en situación de pobreza infantil. A veces lo que para muchas familias pueden ser pequeños gastos de 50, 100 euros o 200 euros, para las personas que están cobrando la renta básica puede suponer un 20 o 30 % de su renta, que en el caso de un gasto infantil,( leche infantil, gafas, medicamentos, material escolar etc.), puede suponer un retraso en su compra de varias semanas hasta que reciben la ayuda de emergencia  social, por lo cual ambos presidentes creen que debe concederse automáticamente a dichas familias que ya estén cobrando la renta básica, para que el problema no se agrave. Por ello Diestro recomienda “Reducir el periodo de tiempo previsto para la resolución y cobro de las prestaciones sociales , agilizando su tramitación, especialmente si tienen por objetivo resolver situaciones de precariedad económica infantil”.

 

Jose Antonio Abad, del  Banco de Alimentos Infantiles, ha señalado que las ayudas sociales son fundamentales para combatir la pobreza infantil ya que “la presencia en la infancia de situaciones de pobreza o exclusión social dificulta la movilidad social, incrementa la probabilidad de fracaso y abandono escolar o predice la aparición de problemas de salud”.

 

La lucha contra el riesgo de pobreza o exclusión social hace necesaria una atención integral a los menores y sus familias para que la situación económica o de exclusión social en la que viven no les impida disfrutar plenamente de sus derechos.

 

La evolución de la tasa de pobreza infantil ha hecho que los niños pasen a ser el grupo de edad de la población española con el riesgo de pobreza más alto. La crisis económica provoca un incremento muy alarmante de la pobreza severa que afecta en especial a los niños.

 

Según Cáritas , en la actualidad tener un hijo es un indicador de riesgo. La tasa de pobreza general, que para 2014 está en el 25% de la población y en el 33% para los menores de 16 años, se multiplica por 1,5 entre quienes tienen un niño y por 3,5 cuando hay más de tres en la familia. “Este fenómeno social es una de las cosas que más distinguen la realidad de nuestro país, la brecha entre familias con niños y sin ellos triplica la que se da en la Unión Europea”.

 

Desde Banco de Alimentos Infantiles agradecen a la Federación de Municipios de Cantabria, su solidaridad y sensibilización que tienen en lucha contra la pobreza infantil e invitan a todos los ayuntamientos de Cantabria a unirse a este convenio de colaboración y la campaña “Todos juntos contra la pobreza infantil”.